Carlos Gómez. En el muy carnavalero Barrio de la Viña, en pleno corazón de la ciudad de Cádiz, podría avecinarse una nueva coronación canónica. Un sueño que se inició hace ahora una década y que repentinamente comienza a volver a latir con intensidad en el corazón de sus hermanos y de muchos gaditanos, la Coronación Canónica de la Virgen de las Penas, titular mariana de la Hermandad de La Palma.
Ha sido el párroco, Juan Enrique Sánchez, quien ha revelado el anuncio, para sorpresa de muchos cofrades de la ciudad, de reanudar los trámites precisos para que la dolorosa pueda ser agraciada con esta distinción que se alimenta de la incuestionable devoción que la Virgen de las Penas despierta entre los gaditanos.
La Virgen de las Penas, de autor desconocido, pese a que hay quienes la atribuyen a la obra de Fernando Ortiz, es escultura de candelero procedente del convento de Capuchinos y fue cedida por el Obispado en 1947. Fue retocada por el escultor Francisco Buiza y corregidos detalles de policromía por Álvarez Duarte.
Se da la curiosa circunstancia de que la otra titular mariana de la corporación, la imagen de Nuestra Señora de la Palma, fue coronada canónicamente en el año 1987 por el Obispo Antonio Dorado Soto en la Santa Iglesia Catedral de Cádiz, con lo que se convertiría, caso de salir adelante el proceso, en una de las pocas hermandades con dos titulares coronadas.
Cabe recordar que cuando se realizó el planteamiento original, hace una década, el obispo no se mostró receptivo "porque tenía varios expedientes por dar salida", la Virgen del Carmen, María Auxiliadora o Servitas y que en el programa elaborado por Francisco Javier Lucero, con el que acaba de recibir el respaldo mayoritario del cabildo de elecciones para los próximos cuatro años, incluye la coronación de la Virgen. Habrá que ver ahora la respuesta de Palacio así como cuál es la Obra Social asociada que presenta la corporación, cuestión fundamental para que el proyecto llegue a buen término.
Foto Hermandad de la Palma