Carlos Gómez. Monseñor Amadeo Rodríguez Magro, obispo de la Diócesis de Jaén, he erigido canónicamente a la Agrupación parroquial de Nuestra Señora del Rocío de Jamilena como nueva Hermandad canónicamente establecida. Una noticia que ha llenado de orgullo y satisfacción no sólo a los rocieros de la localidad jiennense sino también a los de la Hermandad del Rocío de Córdoba. No en vano la filial cordobesa es filial de la hasta ahora Agrupación parroquial, por los que los evidentes lazos de unión han motivado que la dicha se haya compartido a orillas del Guadalquivir.
Esta magnífica nueva se confirma apenas unos días después de que la Hermandad de Montoro solicitase a la Hermandad del Rocío de Córdoba que la amadrine en su nuevo camino cuya meta es convertirse en hermandad filial, a lo que la filial 51 respondió afirmativamente, como no podía ser de otra forma. Recordemos que la Hermandad de Córdoba tiene como madrina a la Hermandad de Lucena, la más antigua de la provincia; y como ahijadas, a las que se suma la Hermandad montoreña, la Hermandad del Rocío de Madrid Moratalaz y la Asociación Rociera de Jamilena, ahora Hermandad en virtud del decreto episcopal.
Foto Hermandad de Jamilena