Blas Jesús Muñoz. Cuando esta tarde la Hermandad del Perdón salga a las calles de Córdoba su cortejo presentará diversas novedades que, más allá de lo meramente patrimonial, suponen la apuesta decidida de su hermano mayor y junta de gobierno.
Fernando Castro fue elegido máximo responsable de la Hermandad del Perdón el pasado 2014 y, desde su nombramiento, la corporación de San Roque no ha hecho sino dar pasos decididos hacia una intensa renovación. Todo ello, marcado por el obligado traslado a la Trinidad a causa de las obras de la sede canónica y por la enfermedad que, el recién nombrado hermano mayor, padeció.
Aun con todo, Castro ha sabido sobreponerse a estas contrariedades y ha iniciado un proceso renovador de la cofradía que se plasmará, de forma material y pública, en la jornada de hoy Miércoles Santo. Dicho proceso cuenta con la novedad más notoria del cambio de disposición en el misterio, en aras de que el Señor del Perdón posea un mayor protagonismo.
No obstante, la cofradía presentará más estrenos como la túnica del titular cristífero salido de las gubias de Romero Zafra, el exorno floral de ambos pasos que corre a cargo de Pinsapo, así como un juego de potencias, manto, etc.
Sin embargo, alejados de la pura labor de enriquecimiento patrimonial que la Hermandad del Perdón ha iniciado, la intensa actividad que la hermandad está realizando muestra y demuestra el empeño decidido de su máximo responsable. Una labor, la de Fernando Castro, tan necesaria para las cofradías en la actualidad como reconocible y loable.
Recordatorio Nisán: IX La Bofetá