Blas Jesús Muñoz. Dos antecedentes, en forma tanto de decreto como de negativa episcopal, parecen anunciar el principio del final de las salidas extraordinarias, al menos en las diócesis de Sevilla y Málaga. Con Juan José Asenjo y Jesús Catalá como los precursores de dicha medida.
Mientras que el Arzobispo de Sevilla emitía el pasado mes enero un Decreto por medio del que se regulan las salidas extraordinarias, la autoridad Diocesana de la Costa del Sol no ha regulado nada al respecto, pero recientemente ha mostrado un criterio por medio del cual puede denegar procesiones fuera de su fecha establecida.
Negativa a la Oliva
Así las cosas, el organismo cuyo pastor es Mona. Catalá ha denegado la salida extraordinaria que se hallaba prevista para la Virgen de la Oliva el próximo 24 de octubre. Cabe destacar que el argumentario de la petición radicaba en el vigésimo aniversario de la Imagen.
Para el organismo diocesano dicha motivación ha resultado insuficiente y, en cierta medida, se atribuye a la "moda" existente en torno a este tipo de salidas. Un precedente que, a buen seguro, puede pesar de cara al horizonte de las decisiones que, en diversos puntos de nuestra geografía puedan adoptarse. Recordando que, en la archidiócesis hispalense, si bien se han aceptado diversas peticiones, no es menos cierto que se han denegado otras que no se ajustaban a los parametros establecidos en el antedicho Decreto.
Recordatorio La maratoniana extraordinaria de la Hiniesta