Juan Pérez. Como les contábamos hace apenas unas horas en Gente de Paz, la Banda de Cornetas y Tambores Amor de Cristo y San Sebastián y la Hermandad de la Hiniesta, de común acuerdo, han decidido no renovar el compromiso que las ha unido en los últimos años a causa de la oportunidad que le ha surgido a la formación musical que hasta ahora ha acompañado a la cruz de guía de la corporación de San Julián de iniciar una nueva trayectoria en el acompañamiento musical de otros cortejos procesionales.
Conocida la separación, las preguntas surgen de forma inevitable: ¿Seguirá La Hiniesta apostando por tener acompañamiento musical en su Cruz de Guía? Y, en caso afirmativo ¿Por qué formación se decantará? ¿Será la Agrupación Musical Juvenil de Santa María Magdalena de El Arahal la banda elegida?
No es descabellado pensar que esta agrupación pueda tomar el relevo de Amor de Cristo, ya que sus hermanos mayores ponen sus sones al Cristo de la Buena Muerte desde hace tanto tiempo que penssar en el Crucificado de San Julián se asocia a las marchas más clásicas de El Arahal. Además el gesto tendría un carácter simbólico innegable pudiendo ver a lo largo del cortejo del Domingo de Ramos a varias generaciones de músicos en distintos planos o etapas. Toda una alegoría musical.
