Blas Jesús Muñoz. No supone un hecho novedoso el que dos corporaciones penitenciales cedan alguna pieza de su patrimonio, de forma temporal. Dichos préstamos suelen realizarse de forma puntual, para algún tipo de celebración señalada, o de forma más extendida en el tiempo.
Este es el caso de la cesión que ha hecho la Hermandad de Nuestra Señora de las Angustias a la cofradía de la Estrella. Así pues, desde hace unos días, la Virgen de la Estrella reposa sobre una peana que, durante los últimos meses y con motivo restauración de otra que la corporación posee, ha venido sosteniendo a la Titular de San Agustín.
Un gesto que denota la fluida relación entre ambas instituciones penitencial, si bien no es único. El antecedente más reciente lo encontramos en la cesión, por parte de la Hermandad de la Esperanza a la del Prendimiento, de otra peana.
De esta manera, el pasado Martes Santo de 2015, como ya les informamos en Gente de Paz, la Virgen de la Piedad reposaba en su salida procesional con la mencionada base que les cediera la corporación de San Andrés.
Recordatorio La Crónica: Un Jueves Santo de fervor e intensidad
