Blas Jesús Muñoz. Cuando la Hermandad de la Sagrada Cena se disponga a abordar las calles de Poniente, el nombre de uno de sus cofrades fluctuará en la atmósfera de la ciudad que abre su ser de sol al Jueves Santo. En su figura destaca, mucho más allá del cofrade, la persona que con su tesón y ganas es parte de la mejor historia de la corporación del Beato Álvaro.
Paco es un amigo, una persona de las que hoy en día escasean. Sin dobleces, llana, directa y un oído que escucha atento. Es parte de la aventura iniciada hace años ya por su hermandad y uno de los nombres que han hecho de la recuperación histórica de Córdoba la realidad brillante que hoy conocemos.
Lo conocí en los o imeros dos mil, cuando recuperó para la revista Alto Guadalquivir a figuras como las de Ricardo, Vacas o Roig. Fueron años regalados a la conciencia que vendría y me mostró el recuerdo de una Córdoba que siempre quise conocer, como en las estampas que logró trazar en mi mente del Prendimiento, por ejemplo.
Esta tarde será distinta para Paco. Este Jueves su nombre, su ilusión que los años no han vencido seguirá al pie de las calles que surca el Señor de la Fe. Tu nombre, de alguna manera, va unido al mío. Gracias por todo.
Recordatorio El nombre del Miércoles Santo: Fernando Chiachío
