La formación religiosa y el costal no siempre han ido de la
mano, pero para David Simón son dos aspectos de las hermandades que siempre han
de estar unidos. Estudioso de la Pasión, este cordobés de 36 años publicó en
octubre de 2013 un libro titulado «Historia y vida de la Semana Santa». Hermano
de la hermandad de la Buena Muerte, el Huerto y el Calvario, ejerce como
capataz en esta última y en el paso del Corpus de la Catedral. Mientras tanto,
continúa bajo las trabajaderas de los Afligidos de Puente Genil.
-Hace apenas seis meses ha estrenado libro. ¿Está satisfecho
con la acogida?
-Sí, estoy muy contento porque por las llamadas y mensajes
que he recibido sé que hay mucha gente que está comprando el libro. Hay
personas que se han puesto en contacto conmigo a través de las redes sociales o
que me han parado por la calle en alguno de los ensayos para felicitarme o
comentar ciertos aspectos que le han gustado. No tengo datos exactos de la
venta, pero en algunas librerías se ha llegado a agotar y eso es buena señal.
-¿Qué es lo que más le ha gustado a los lectores?
-Ha llamado la atención un apartado de prensa histórica
desde 1854 que recoge la intrahistoria de las cofradías. Se trata de unir
historia en mayúscula y en minúscula.
-¿Considera que la Córdoba cofrade conoce la historia de sus
hermandades?
-No, de forma rotunda. Durante la búsqueda de documentación
me he encontrado con hermanos mayores que cuando me he sentado con ellos no
sabían la fecha exacta de fundación de su propia hermandad. Si ellos no los
saben es complicado que los que estén menos vinculados conozcan esta
información.
-¿Piensa que las cofradías fomentan suficientemente la
formación católica?
-Depende mucho de la cofradía de la que hablemos. Hay
hermandades que se fijan mucho en este aspecto y que ofrecen catequesis,
retiros espirituales o cursos de formación cristiana, pero hay otras que viven
casi de espaldas a la parroquia y al mundo religioso. Es una asignatura que
está pendiente. Los tres pilares de una cofradía son formación, caridad y
penitencia. Y el primero creo que es el que más cojea.
-¿Cómo fomenta esta implicación de sus costaleros en la vida
religiosa?
-Yo lo he tenido más fácil porque la inmensa mayoría de mis
costaleros son hermanos de la cofradía del Calvario. Tenemos un blog que yo
puse en marcha y en el que vamos convocando a todos los cultos y fomentamos la
vida de hermandad.
-Sobre la incorporación de la Catedral como parte de la
carrera oficial, ¿cree que el Vía Crucis Magno fue prueba de fuego?
-Como cofrade y como católico considero que el paso por el
Santísimo en la Catedral debería ser obligatorio para todas las hermandades. En
cuanto al Via Crucis Magno, se demostró que físicamente es posible, pero en
términos de organización sería muy diferente a un día normal de Semana Santa.
-Como estudioso de las cofradías ¿en qué punto se encuentran
las hermandades?
-Están creciendo a un nivel más rápido que de afianzamiento.
Prefiero que se vayan afianzando poco a poco a que corran. Aquí queremos hacer
tradición de cosas que llevan poco tiempo y la gente que viene detrás tiene que
asimilarlo.
-¿Qué opina sobre el regreso de las Angustias a San Agustín?
-Tengo sentimientos encontrados y me da un pellizquito no
verla en San Pablo.
Entrevista realizada por Rafael Carlos Mendoza para ABC Córdoba