Cada año, cuando finaliza, hago una escapada al Rocío para darle gracias a la Señora por el año que me ha regalado, y como no, para pedirle que el próximo sea, por lo menos, como el que se escapa. Este año, no he pedido mucho, más bien he ido a agradecerle por todo lo acontecido en mi vida personal y profesional, aunque bueno, algo sí es verdad que ha caído en el saco de las peticiones.
Después de hablar con Ella durante un buen rato, puse rumbo a Sevilla y allí, entre luces, belenes, villancicos por las calles y niños correteando a mi alrededor, caí en la cuenta que aún no había escrito mi carta a Los Reyes Magos... ¡¡qué estrés me entró por un momento!! Mi carta no llegaría a tiempo, más que nada porque seguro que ya están de viaje, desde Oriente, largo es el camino. Pero pensé, que si la escribía en el blog, la leerían al instante, porque a pesar de lo que algunos dirigentes de nuestras hermandades piensan, sí nos leen. Así que... Sus Majestades, ahí va mi carta...
Córdoba, 30 de diciembre de 2013
Queridos Reyes Magos:
Soy Raquel Medina. Se lo digo, por no ir en un sobre como la de cualquier mortal (prometo que el año próximo me acordaré de echarla con más tiempo)..
Este año he sido muy buena. Bueno… sólo buena, aunque en algunos casos haya parecido o alguien haya creído que no. Pero les puedo asegurar que ha sido sin querer, si así ha ocurrido.