Este Domingo, como ya es tradición, en el barrio de Levante de nuestra ciudad, la ilusión se volvió a apoderar de los más pequeños del lugar con la procesión que, como cada año, organiza el Colegio de Nuestra Señora de Guadalupe junto con la Guardería Jardilandia.
Un año más, volvieron a a ilusionarse a la hora de preparar el cortejo. Cortejo en el que nada ni nadie faltó. Como una hermandad en miniatura donde tenían cabida desde niños de hebreos hasta un sector de mantillas, fueron avanzando hasta completar el recorrido, siempre rodeado de los seres más queridos y una gran cantidad de vecinos.
Dos pasos pusieron en la calle, el del Señor acompañado por un ejército romano, y el de Nuestra Señora de Soledad, acompañado musicalmente por la Banda de Nuestra Señora de la Esperanza.
Raquel Medina Rodríguez