La Esperanza de la Trinidad vuelve a sorprender. La portentosa talla de Juan de Astorga ha sido ataviada de blanco, el color del tiempo estival de los meses de verano.
Como en antaño, como si de una fotografía en blanco y negro se tratase. Con diadema, el manto recogido, con el ancla como símbolo de la Esperanza en sus manos y un tocado de lamé bordado indú que refleja a la Virgen de la Esperanza como a principios del siglo veinte.
Como en antaño, como si de una fotografía en blanco y negro se tratase. Con diadema, el manto recogido, con el ancla como símbolo de la Esperanza en sus manos y un tocado de lamé bordado indú que refleja a la Virgen de la Esperanza como a principios del siglo veinte.
También luce con un collar sobre el cuello. Así ha ataviado a la Virgen Joaquín Gómez Serrano, su vestidor. Una estampa que pudo contemplarse en el verano de 2011 con el cierre de la capilla de la hermandad de la Trinidad por obras.
Vimos casi de igual forma a la Esperanza de la Trinidad de otra época en el altar del Sagrado Corazón de la basílica de María Auxiliadora.